Nadie niega a la medicina el carácter de ciencia experimental ni al médico el atributo de científico bien pegado a la realidad. No en vano la medicina se ha separado de la brujería y del empirismo y se ha aliado con la evidencia. La observación del fenómeno, la búsqueda de sus causas y la experimentación de remedios que alteren el devenir natural de la enfermedad son connaturales a la profesión médica y, por tanto, las conexiones con lo sobrenatural son algo vedado al médico en una primera aproximación. El ateísmo y el agnosticismo han acompañado a no pocos médicos. La oposición a doctrinas panteístas o teocráticas extendidas por todos los órdenes y sectores ha favorecido la aparición de posiciones radicales entre los médicos.
FUENTE: Editorial Springer.

ÚNETE A NUESTROS GRUPOS Y REDES SOCIALES PARA MANTENERTE ACTUALIZADO E INFORMADO EN EL TEMA REFERENTE A SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO.
[bdp_post_slider]